¿Arriba o abajo?

  Jehová o Yahveh, Allah,  Buda, Shang-Di, Kamisama, Inti, Anu, Ahura-Mazda, Ra, Apolo, Zeus o Júpiter, Plutón o Hades, Baco o Dioniso, Shiva, Brahma o Visnú. Si pusiese todos no acabaría nunca y aún así seguro que me dejaría alguno por el camino. Entre tú y yo, puedes llamarlo como quieras.

  Todos tienen un máximo común divisor y un significado. Se nace, crece, vive y muere por ellos. Ocurren auténticos milagros gracias a la motivación que imprimen, tanta que llegan a acabar con la vida de seres humanos. Porque crees en este, porque crees en el otro, porque crees en varios, porque no crees en ninguno. Porque no crees en lo que creo yo. Porque otros lo dicen, porque así todo tiene sentido. Porque eres más rico, más pobre, más feo. Porque tengo baja la autoestima.

  No sé si tú, lector de esta humilde opinión, crees en alguno de los antes mencionados o en ninguno. O si ni siquiera te importa. Da igual. Las creencias son algo muy personal como para estigmatizarlas o lo que es peor, prejuzgarte a ti.

  Es por ello que me declaro politeísta. Creo en mi madre, en mi padre, en mis hermanos, en mi familia, en mis amigos, en ella. Creo en las personas que tienen algo que ofrecer a los demás, que nunca dan menos de lo que piden y que de su vocabulario han borrado la palabra rendirse. Porque yo, ante todo, creo en la vida.

Take a deep breath.

Coruña.

Elecciones 20N (Blog del 20/9/2011)

Hoy es día de elecciones, ¿no? Pues bien, creo que deberíamos tener muy claro que salgan los resultados que salgan el margen es muy estrecho. No solo depende de ellos. 

Si hemos llegado a esta situación creo que en cierta medida es gracias a ese gran salvador que parece Alemania. Alemania no cambia la situación porque a Alemania NO le interesa cambiar la situación. Sabían que la situación de España no era como para exigir esa rentabilidad por vender deuda, pero les interesa que se dude de la posibilidad de un impago para luego ser la primera que compra, con unos beneficios a renta fija asombrosos. Un negocio redondo, además de que así pagan mucho menos por colocar su propia deuda ya que son los que transmiten mas confianza. Un claro ejemplo de especulación. Pero claro, quién va a despeinar a Alemania. 

Centrándome en lo que hoy nos ocupa creo que lo que necesita España, a mi parecer, es un líder. Un señor Presidente que sepa lo que hace, con cierto don de gentes y, como ya he dicho en más de una ocasión, con mucha preparación, cultura y sentido común. Puestos a decir lo suyo sería que para llegar a sentarse en el Congreso de los Diputados fuesen necesarios unos requisitos de acceso así como exámenes e idiomas, algo que solo una minoría muy cualificada pudiese lograr. Hay mucho en juego como para estar en manos de ineptos. 

Dicho todo esto, y ojalá me equivoque, viendo el panorama actual no encuentro a un verdadero líder en los principales partidos, por lo que a falta de una hora para ir a votar no tengo ni la más ligera idea de que voy a tachar en el sobre. Mucha suerte, espero que lo tengáis mas claro que yo.